Este cómic autobiográfico relata el recorrido vital de la autora en reconocerse como chica trans desde su infancia hasta su juventud. La historia se detiene en momentos significativos de su proceso: la sensación de sentirse diferente en la niñez, los intentos por aceptar la normativa patriarcal siendo adolescente y la decisión de ser sí misma en su juventud. La obra va dando cuenta, tanto en el discurso escrito como visual, de la diferenciación tajante de roles de género que la sociedad intenta establecer y perpetuar, discutiendo, en particular, la violencia física y simbólica asociada a ello. La ilustración traduce esta disyuntiva por medio de la contraposición entre los colores azul y rosa. Aunque podría leerse como un cliché de la narrativa trans, el uso del color aporta, en este caso, porque permite evidenciar el complejo tránsito de la protagonista. Recomendado desde los 14 años.